Voz : Donna y su camino hacia el éxito

No satisfecha con ser intérprete, creó en 2004 junto a su marido, el músico Bill Benfield, la agencia Dagmusic, que gestiona la carrera de otros artistas. “Uno de mis clientes más antiguos se quejaba de que las otras agencias de Tokio le enviaban siempre a los mismos cantantes y de que tenía que ir personalmente a Los Ángeles o a Londres para buscar nuevas caras. Le pedí que me dejara ocuparme del asunto y me puse a buscar todos los talentos desconocidos de la capital. Tenemos actualmente contratados 400 cantantes, actores y músicos. También proporcionamos actores japoneses a compañías de videojuegos extranjeras que quieren voces niponas, pero estamos especializados en voces y cantantes en inglés”.
Donna Burke reconoce que las cosas han cambiado mucho desde que llegó a Japón. “Por un lado, internet ha cambiado radicalmente nuestra forma de trabajar. Cuando comencé tenía que enviar los casetes por mensajero. Después, pasamos al CD. Ahora enviamos simplemente un e-mail. Por otro lado, cada vez más clientes nos encuentran a través de Google. Casi todos los días recibimos mensajes de personas que no conocemos”.
Claro que instalarse en un nuevo país no es siempre fácil; su periodo más difícil en Japón fue durante la crisis financiera de 2008. “De golpe no había trabajo. Y el tsunami del 11 de marzo de 2011 no mejoró las cosas. Los cinco años siguientes fueron bastante difíciles para todo el mundo en el sector”. Por eso Donna Burke forma parte del grupo de personas que recibió con alivio la noticia de la organización de los Juegos Olímpicos de 2020. “Desde que Tokio ha conseguido los JJ.OO., los negocios han remontado. Claro que los presupuestos han disminuido y la naturaleza de nuestra compañía ha cambiado. Antes teníamos menos clientes pero gastaban mucho, ahora tenemos muchos más pero vienen con proyectos más modestos”.
Es esta polivalencia lo que le ha permitido tener éxito en diferentes facetas. Sin embargo, Donna reconoce que cantar es lo que más la satisface. “Cantar es interpretar un papel, me permite conectarme a la gente. Incluso si alguien no entiende el idioma, es posible emocionarle. Por eso cantar es sin duda mi primer y gran amor”, asegura. Como ha interpretado numerosas canciones de videojuegos y de anime, en ocaciones le han pedido componer la letra. Es lo que ha hecho para «Morning Sky» y «Moonless Starry Night» de «Final Fantasy Crystal Chronicles». “Intento escuchar la melodía varias veces mientras hago otra cosa para que se impriman en mi subconsciente. Dejo entonces que las cosas fluyan. Así es más fácil encontrar metáforas y conseguir profundidad. Me gusta corregir la letra mientras canto durante la grabación ya que facilita el trabajo. A veces los textos que se escriben evolucionan incluso en el momento de la interpretación”, explica.

G.S.