Según un estudio reciente, los japoneses entre 18 y 35 años tienen cada vez menos relaciones sexuales. En efecto, el 42% de los hombres y el 44% de las mujeres en este segmento de edad confiesan ser vírgenes. En 2010, solo un 36.2% de los hombres y un 38.7% de las mujeres entre 18 y 35 años afirmaban serlo. Una situación cuanto menos paradójica en un país donde la industria del sexo es la segunda más boyante después de la automovilística.