Direcciones : Sabor auténtico garantizado

El sukiyaki de dos carnes (buey Waô y cerdo Rindô) es uno de los platos imprescindibles en Shinojino. / Odaira Namihei para Zoom Japón

La calidad de los productos de su tierra es legendaria. Hemos probado para vosotros tres excelentes establecimientos que no hay que perderse.

A dos pasos del castillo de Kumamoto, el restaurante Shinojino (1-10-3 Shimotôri, Chûô-ku, Kumamoto, Ginza Play 8ª planta. Tel. 096-356-1029. Abierto de 11h30 a 14h y de 17h30 a 22h30) es el sitio perfecto para el viajero que no dispone de mucho tiempo pero que desea descubrir la calidad de los productos locales. En efecto, todo lo que aquí se sirve proviene de las granjas de la región, en particular el delicioso buey Waô o el no menos sabroso cerdo Rindô. Escrutando la sugerente carta y los platos que piden otros clientes, dan ganas de probar todo. Nuestra recomendación: el sukiyaki de dos carnes. ¡Una verdadera delicia!
En Amakusa, los más sibaritas no podrán perderse el café Marukin (11-10 Chûô Shinmachi, Amakusa. Abierto de 10h a 18h. Cerrado el miércoles) para probar su famoso taiyaki (150 yenes), una especie de pastel en forma de pescado que aquí tiene la particularidad de ser redondo y en el que la guarnición está hecha de crema y pasta de alubias rojas (anko). Para un buen pescado, hay que pasarse por el restaurante del joven chef Hama Yoshiaki. Ja no me zushi (6-3 Ôhama-machi, Amakusa. Tel. 0969-23-2238. Abierto de 11h30 a 14h y de 17h30 à 22h. Cerrado el miércoles), sin duda, uno de los mejores establecimientos de pescado crudo de la región. Fundado en 1955, es un encantador negocio familiar donde el padre de Yoshiaki aún trabaja en una atmósfera acogedora. Con un poco de suerte podremos situarnos en el mostrador y observar la destreza con la que los chefs preparan los diferentes menús de la carta. La excelente calidad del servicio contribuye a que este momento gastronómico sea realmente inolvidable.

Odaira Namihei

Cada pieza realizada por Hama Yoshiaki es un placer para la vista y para el paladar. / Odaira Namihei para Zoom Japón